Caminos

Se despertó como todas las mañanas, estirándose entre las sábanas deseando quedarse un rato más en la cama. Mientras hacía un esfuerzo por levantarse, su gato aparecía para darle el beso de buenos días y por supuesto, para pedirle la comida. Una ducha fría de 5 minutos y ya estaba lista. Mientras se preparaba el desayuno, se cambiaba: top negro, calzas deportivas, zapatillas nike rosas; y exactamente a las 8:00 am como todos los días se abría la puerta de su casa y se veía como su silueta iba desapareciendo en el camino hacia el parque.

Este día era de todo, menos ordinario. Aunque las flores olían igual que ayer, el pavimento estaba frío como todas las mañanas y los árboles estaban en el mismo lugar, hay algo que no lo estaba. Ya no estaba sola corriendo por el camino verde, había alguien más, alguien nuevo. Y es con ese "alguien nuevo" que se choca y cae de espaldas al suelo. Antes no lo había visto, pero cuando ve que una mano aparece extendida para ayudarla a levantarse y mira para arriba, lo ve. Parecía que había salido de un cuento de hadas, de su propio cuento de hadas personalizado, por que era como ella se lo imaginó siempre.